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EPARQUÍA GRECO CATOLICA DE MUKACHEVO

La Eparquía Greco Católica de Mukachevo tiene una historia larga, noble, rica y agitada, que nos devuelve a las fuentes de la evangelización de los pueblos eslavos. Situada en un territorio mayormente montañoso tendido sobre las laderas orientales de los Cárpatos ucranianos, sus valles y cimas rodean un territorio definido como Transcarpazia, habitado desde la antigüedad hasta nuestros días por un pueblo con habitantes que se identifican con el nombre de Rutenos. Exactamente por esta peculiaridad antropológica la diócesis se define, como Eparquía de Mukachevo de los Rutenos.

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La historia nos lleva a la segunda mitad del IX siglo, cuando, según la tradición, los santos Cirilo y Metodio, en su evangelización de los pueblos eslavos, llegaron hasta las laderas de los montes Cárpatos de Rutenia trayendo consigo el cristianismo y su tradición litúrgica de la iglesia de Constantinopla.

Por ello, podemos decir con firmeza que la Eparquía, fruto de la evangelización de los apóstoles de los pueblos eslavos, se fortifica en la fe católica todavía desde antes del grande cisma de Oriente, que aconteció en el 1054, cuando la Iglesia fue herida por la división entre los Católicos y Ortodoxos. La zona se encontraba bajo la influencia de la Rus de Kiev, que en aquel tiempo tenía un gran éxito y esplendor.

Situada en un territorio habitado por diversas naciones, Transcarpatia es un puente natural entre el Este y el Oeste. El 24 de Abril de 1646, en la capilla del castillo de Uzhgorod, firmaron numerosos sacerdotes un documento que declara la unión de la Eparquía(diócesis) de Mukachevo con la Iglesia Católica, que pide al papa conservar el rito bizantino y sus costumbres. La Eparquía está subordinada a la Diócesis húngara de Eger. Solo el 19 de septiembre del 1771, el papa Clemente XIV con la bula «Eximie Regalium Principium» establece la autonomía total de la Eparquía de Mukachevo.

En el 1780 el obispo Andrey Bachynski cambia de lugar la residencia episcopal de la ciudad de Mukachevo a Uzhgorod, y así vuelve a ser punto de referencia de una Eparquía que se extiende no solo en Transkarpatia – hoy territorio ucraniano– pero también en territorios de las actuales Eslovaquia oriental y en Rumania septentrional.

A partir del siglo XIX muchas personas de Transkarpatia, movidas por el sueño americano de hacer una nueva vida al otro lado del océano, emigran a los Estados Unidos llevando consigo tradiciones, costumbres y el apego a la Iglesia Rutena, y así se convierte en Iglesia Madre de las eparquías de Pittsburg y Parma.

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En el 1937 la Santa Sede concede a la Eparquía de Mukachevo el estado de Iglesia “sui iuris”. Eso quiere decir que se somete directamente al Santo Padre y puede así mantener todas sus peculiaridades: el idioma litúrgico eslavo-eclesiástico, así como las minorías lingüísticas y étnicas que tiene presentes (rutena, húngara, ucraniana, rumana, eslovaca y otras).

La historia nos lleva a la segunda mitad del IX siglo, cuando, según la tradición, los santos Cirilo y Metodio, en su evangelización de los pueblos eslavos, llegaron hasta las laderas de los montes Cárpatos de Rutenia trayendo consigo el cristianismo y su tradición litúrgica de la iglesia de Constantinopla.

Por ello, podemos decir con firmeza que la Eparquía, fruto de la evangelización de los apóstoles de los pueblos eslavos, se fortifica en la fe católica todavía desde antes del grande cisma de Oriente, que aconteció en el 1054, cuando la Iglesia fue herida por la división entre los Católicos y Ortodoxos. La zona se encontraba bajo la influencia de la Rus de Kiev, que en aquel tiempo tenía un gran éxito y esplendor.

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Tal tarea les tocó cumplir a los tres prelados: Ivan Semedi(ordinario), Ivan Margitych(auxiliar) y Josyp Holovach(auxiliar, muerto en el 2000). Fueron años llenos de esperanza y de alegría por la libertad obtenida, aún con la dificultad de reponer en pie a una Iglesia formada ya no tanto de estructuras como de personas que fueron dispersadas como ovejas sin pastor.

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El 12 de noviembre del 2002 Juan Pablo II nombra obispo ordinario de Bononia  y administrador apostólico ad nutum Sanctae Sedis de la Eparquía de Mukachevo a mons. Milan Šašik (+ 14.07.2020), el cual fue introducido en la diócesis como ordinario el 25 de enero del 2003. En noviembre del 2012 llega la nómina de Nil Juriy Lushchak OFM, el cual recibe la ordenación episcopal el 12 de enero del 2013 en la catedral de Uzhgorod y actualmente continúa la obra de su predecesor siendo Administrador Apostólico.

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Tal tarea les tocó cumplir a los tres prelados: Ivan Semedi(ordinario), Ivan Margitych(auxiliar) y Josyp Holovach(auxiliar, muerto en el 2000). Fueron años llenos de esperanza y de alegría por la libertad obtenida, aún con la dificultad de reponer en pie a una Iglesia formada ya no tanto de estructuras como de personas que fueron dispersadas como ovejas sin pastor.

El 12 de noviembre del 2002 Juan Pablo II nombra obispo ordinario de Bononia  y administrador apostólico ad nutum Sanctae Sedis de la Eparquía de Mukachevo a mons. Milan Šašik (+ 14.07.2020), el cual fue introducido en la diócesis como ordinario el 25 de enero del 2003. En noviembre del 2012 llega la nómina de Nil Juriy Lushchak OFM, el cual recibe la ordenación episcopal el 12 de enero del 2013 en la catedral de Uzhgorod y actualmente continúa la obra de su predecesor siendo Administrador Apostólico.

Tal tarea les tocó cumplir a los tres prelados: Ivan Semedi(ordinario), Ivan Margitych(auxiliar) y Josyp Holovach(auxiliar, muerto en el 2000). Fueron años llenos de esperanza y de alegría por la libertad obtenida, aún con la dificultad de reponer en pie a una Iglesia formada ya no tanto de estructuras como de personas que fueron dispersadas como ovejas sin pastor.

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